En Jerusalén, el Vicario para los trabajadores migrantes y solicitantes de asilo, Padre Nikodemus Schnabel, OSB, presidió la celebración eucarística para conmemorar el martirio de San Pedro Poveda hace 86 años, el 28 de julio de 1936.

varias jerusalenEl sábado 30 de julio, más de treinta y cinco personas, amigos de la Institución Teresiana y trabajadores migrantes que forman un grupo de estudio de la Biblia en Jerusalén, se unieron a este evento festivo significativo, no solo para ellos, sino también para el movimiento de amigos que comparten y apoyan la misión de la Institución Teresiana en Tierra Santa, incluyendo a aquellos de la Universidad de Belén.

El P. Nikodemus habló del don de fortaleza de San Pedro Poveda, de su resiliencia. Es admirable cómo estaba anclado en la voluntad de Dios, su serenidad y mansedumbre ante las contradicciones que se le presentaban. Guiado por el Espíritu, forjó caminos no transitados, coronados por la fundación de la Institución Teresiana, exhortando a sus miembros a ser “sal de la tierra y luz del mundo”.

Bendición

La IT en Jerusalén cuenta con una reliquia de San Pedro Poveda y en esta ocasión los participantes recibieron una bendición que el P. Nikodemus impartió a cada persona después de la misa.

70 años en Tierra Santa

Agradecemos a San Pedro Poveda que hizo posible que la Institución Teresiana, con la aprobación papal en 1924, se haya extendido en 30 países. En 1952 –hace 70 años– llegaron las primeras teresianas a Tierra Santa, para estar presentes en el “lugar de la Redención” y emular la fe y la fortaleza de la Virgen al pie de la Cruz de su Hijo.

Si, como dice el refrán, “una imagen vale más que mil palabras”, el siguiente conjunto de fotos muestra la fe en acción, el sentido de pertenencia, de vida familiar, de alegría, de amistad, de ser unos para otros en el servicio, de llegar a las periferias... todo porque creemos en la belleza de ser uno en medio de la diversidad, optando por la paz y la unidad en un mundo marcado por la división y el odio.

Para recapitular, queremos subrayar que la alegría –que prevalece en nuestras familias, comunidades y reuniones– es la característica de los jóvenes, incluyendo también a los “jóvenes de corazón” y a los “eternamente jóvenes”, porque es una alegría que brota de la firme y profunda seguridad de ser amados por Dios.

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Texto original en inglés: Mellie Brodeth, Jerusalén.
Fotos: Amy Dillo y Malou Negolo
Traducción Info IT.

 

 

 

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