Miembros de la Institución de los cuatro continentes implicados en el desarrollo del Sínodo “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión” en las iglesias locales, han puesto en común el recorrido que van realizando.
“Estamos ante un acontecimiento eclesial, que ha sido calificado como el más relevante de la historia de la Iglesia reciente, tras el Vaticano II. Es la primera vez que un sínodo comienza queriendo escuchar la voz del Espíritu a través de todas las personas, creyentes o no, y sobre todo de las que están en las periferias”, afirmaba al comenzar el encuentro Maddalena Pievaioli, Secretaria General de la IT y persona de enlace con el Dicasterio y la Secretaría General del Sínodo.
22 representantes de 17 países se unieron en dos encuentros virtuales, a mediados de diciembre. En ambas sesiones participó María Goretti Gonsalves, miembro del Consejo de Gobierno encargada del Sínodo, que facilitó las reuniones. María Rita Martín, del Consejo de Gobierno, participó también uno de los días.
Las respuestas son de todos
La estructura de ambos encuentros fue similar. Tras unos minutos de oración, Maddalena Pievaioli intervino destacando en primer lugar que el Dicasterio ha convocado no sólo a los obispos de las iglesias locales, sino también a las asociaciones y movimientos de toda la Iglesia, para que nombren a un representante que facilite la participación de todos sus miembros en el proceso desde su inicio.
La función de esta persona de enlace es ser cauce de información de ida y vuelta entre el Dicasterio y los contextos locales; facilitar las oportunidades de formación para que el camino sinodal se haga con profundidad; y acompañar, siendo referente para lo que las personas de la Institución implicadas en el proceso puedan necesitar.
¿Cuál es la Iglesia que Dios quiere enviar al mundo en el tercer milenio? ¿Cómo se realiza hoy ese “caminar juntos” que permite a la Iglesia anunciar el evangelio y qué pasos nos invita a dar el Espíritu para crecer como Iglesia sinodal? Son, según recoge el Documento preparatorio, algunas de las preguntas que el Sínodo está llamado a hacerse y que encuentran respuesta en la voz de todos, principalmente de los pobres y marginados, expresó Maddalena.
Respecto a dónde vivir como Institución el proceso sinodal se apuntó:
- Insertados en las comunidades eclesiales locales: parroquias, diócesis… La recogida de las reflexiones ha de llegar a las conferencias episcopales de cada país.
- En cada realidad local de la Institución Teresiana es aconsejable que los miembros planifiquen cómo van a vivir el proceso.
- Implicar a todas las personas que participan en nuestras actividades de misión, activando con creatividad una escucha amplia, para que la voz de quienes quizás no frecuentan las iglesias pueda llegar
Metodología
“El sínodo –señaló Maddalena– nos pide una conversión para pasar del yo al nosotros; conversión a nivel personal, asociativo y eclesial. Para ello puede ayudar la metodología de grupos sinodales, que propone un modo de ser y no sólo de hacer. Metodología que parte de la vida y no de las teorías, en la que hay tiempo para escuchar la experiencia, que incluye los sentimientos, en clave de discernimiento. Metodología inclusiva, dando la posibilidad de ser escuchados a quienes están al margen. Metodología que reconoce la riqueza de los diferentes carismas para el bien de la comunidad y la humanidad. El punto de mira no está en dónde hay que llegar sino en cómo nos dejamos conducir por el Espíritu en el camino”.
Antes de terminar, Maddalena animó a estar atentos a lo que cada conferencia episcopal ofrezca de formación a través de sus webs y también a las webs de otras asociaciones laicales.
Puesta en común
En una segunda parte de los encuentros, cada persona presentó el proceso que se está viviendo en su diócesis o la IT localmente. En algunas iglesias se han realizado consultas, se han nombrado equipos para impulsar la participación en parroquias y la formación de animadores, o se han convocado ya grupos sinodales y a personas que estén dispuestas a animarlos, yendo hacia quienes están más alejados.
El reto es que la información y la convocatoria llegue al mayor número de personas y traducir los temas y las preguntas al lenguaje que el pueblo pueda entender.
Pero hay diócesis y parroquias en las que, aparte del lanzamiento oficial en octubre o la oración por el sínodo que se hace en las parroquias, no se aprecia que el camino esté iniciándose. Las difíciles circunstancias sociopolíticas de algunos contextos parecen influir en ello. Algunas personas señalan que están siendo más fáciles los procesos a nivel de movimientos laicales que de parroquias.
Por parte de la IT, además de la implicación de miembros de diferentes países en los procesos parroquiales, diocesanos o con otros movimientos laicales, han empezado a convocarse en diferentes lugares grupos para trabajar los temas del sínodo. En otros, están planificando cómo hacerlo.
La IT en América ha hecho una reflexión sobre la Iglesia, a raíz de la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe.
Después de compartir las experiencias locales, se abrió un turno para clarificaciones y preguntas: cómo va a llegar el aporte de la Institución al sínodo, cómo compaginar en el próximo año el trabajo del Sínodo y el de preparación de la Asamblea de todas las Asociaciones a.e. (ATA).
Maddalena, Goretti o María Rita expresaron que la experiencia de preparación de la ATA, y la formación que se está ofreciendo en el curso Red-IT, pueden ser un aporte de la Institución al Sínodo, dado que se busca una experiencia sinodal cuya metodología es también la de los círculos de escucha, que parte de la vida para llegar a un discernimiento hacia el compromiso. A su vez, el Consejo de Gobierno y la Secretaria General estudiarán cómo hacer llegar al Dicasterio la aportación como Institución Teresiana, surgida de las reflexiones de los diferentes grupos sinodales.
Se prevé que haya otra reunión de representantes para continuar compartiendo el camino de cada país. Maddalena y Goretti quedaron a disposición para cualquier consulta, animando a impulsar los procesos de participación en cada lugar, favoreciendo la relación con los canales eclesiales de recogida y comunicación, siendo puente entre los miembros de la IT en su país y el nivel general.
En esta página web internacional de la Institución los diferentes grupos IT podrán compartir sus experiencias en el camino del Sínodo.
Estrella Sendra.
